El 2 de marzo de 2013 se inauguró en la Biblioteca Valenciana de San Miguel de los Reyes una exposición que llevaba por título “Un siglo de tebeos” (retrospectiva de la historieta en la Comunidad Valenciana; periodo 1913-2013), en la que se homenajeó a Miguel Quesada, José Ortiz, Enrique Cerdán, Arturo Rojas de la Cámara. César Álvarez “Zésar”, Alberto Marcet, José Lanzón y Emil Frejo. A posteriori se estrenó otra versión el 25 de febrero de 2014 en el Centro Cultural El Carmen, que sirvió para homenajear a Rafael Boluda, Manuel Benet y Antonio Segura. El esfuerzo dejó un poso y el material suficiente para que unos cuantos, liderados por Mac Diego, se lanzaran a la aventura de la puesta a punto de un libro que con el título “Un Siglo de Tebeos”, fue presentado el 29 de mayo último en el Mercado de la Tapineria con motivo de la inauguración de las IV Jornadas del Cómic de Valencia. La presentación estuvo a cargo de Marta Alonso en nombre de la Generalidad Valenciana, de Ricardo Engrá y Pedro Porcel, en su calidad de coautor, que representaron a la Asociación Valenciana de Cómic (Asovalcón) organizadora de las citadas Jornadas. En fecha más reciente, la obra también se presentó en “Futurama”.
El libro recoge paso a paso la realidad de una industria que pasado el tiempo convirtió a Valencia, en especial gracias a las Editoriales Valenciana y Maga, en uno de los pilares de lo que fue en España la época dorada de la historieta. Luego, de acuerdo con la cronología trazada, la obra nos habla de otros periodos por los que pasó el tebeo valenciano hasta llegar a nuestros días.
Al repasar el libro (con cubiertas de Paco Roca), en el preámbulo, nos encontramos en primer lugar con los testimonios de María José Catalá y Marta Alonso vinculadas a la Biblioteca Valenciana (editora de la obra) a través de la Consejería de Educación, Cultura y Deporte de la Generalitat, seguidos de los escritos de Gonzalo Torres, Álvaro Pons, Pedro Porcel, Ismael Quintanilla y Mac Diego. Después es Ricardo Guillamón quien nos habla de los orígenes del tebeo (siglo XIX hasta 1912) para continuar con el periodo de 1913 hasta 1930 que él titula “De la ilustración a la historieta”.y del periodo 1931-1939 que corresponde al de ”La República y la Guerra Civil”. A continuación Gonzalo Torres es quien trata de “La edad de oro del cuaderno: La Escuela Valenciana” 1940-1964, para seguir con “El exilio” que él sitúa entre 1965 y 1975. Carlos Ciurana comenta lo que fue “La Nueva Escuela Valenciana” que ubica en el periodo 1976-1990; luego continúa con la época que va de 1991 a 1999 que pertenece a “La crisis de los noventa”. Al final es Ricardo Engrá el que se atreve con la última parte: “El Siglo XXI” que considera el periodo del año 2000 hasta nuestros días.
En todas esas páginas encontramos información amplia de unos primeros pasos que se asociaron a los “aucas” y a los “coloquios” de ciegos, acompañados de otros que tratan de las primeras publicaciones que buscaban entretener, seguidas de otras dedicadas especialmente a los niños como fueron ªPerragorda”, “Meñique”, “Niños” y “Los Chicos”. “La edad de oro” contempla el trabajo de autores como los hermanos Gago, Vañó, Quesada, José y Leopoldo Ortiz, Bermejo, José Sanchis, Juan Carbó; José Lanzón, Karpa, Emilio y Celedonio Frejo, Rojas de la Cámara, Marcet, Macias, Ambrós, Ramos, Liceras, Serafín, Palop, Segrelles, Soriano Izquierdo, Alamar, Edgar y otros muchos que nos deleitaron con sus dibujos.”El exilio” nos habla de un periodo en el cual, con la valiosa ayuda de agencias como Bardon Art y Selecciones Ilustradas, muchos profesionales tuvieron que buscarse la vida fuera de nuestras fronteras, en países como Alemania, Italia, Reino Unido, Francia, Holanda o los Estados Unidos.
Entre esos autores recordamos a José Ortiz, Miguel Quesada, José Lanzón, Luis Bermejo, Pepe Moreno, González Alacreu, Vicente y Eduardo Vañó, Rafael Boluda, Manuel Benet, César Álvarez “Zésar”, Pedro Martinez y otros. En aquella “movida” tuvieron su importancia los Salones del Cómic y la Ilustración que se celebraron en Valencia auspiciados por el Club DHIN cuyo primer presidente fue Lanzón. De la época de la llamada “Nueva Escuela Valenciana” (expresión un tanto discutida), especialmente viene a mi memoria la figura de Miguel Calatayud una especie de alma máter de un grupo de jóvenes dibujantes compuesto por Sento Llobell, Daniel Torres, Mique Beltrán, Micharmut y Manel Gimeno, deseosos de poner en práctica nuevas ideas.
“La crisis de los noventa” recoge los problemas provocados en el sector por la invasión de otras publicaciones, en especial del manga y las relacionadas con los superhéroes, lo que no fue óbice para que aparecieran otras de corte nacional que dieron cobertura a la obra de autores como Paco Roca, Rafa Fonteriz, Ana Miralles, Sergio Bleda, Miguel Angel Giner, Cristina Durán, Ramón Marcos, Cesar Tormo, Josep de Haro, Lalo Kubala, Nacho Casanova, Jaime Brocal Remohí, Rafa Marín, Salvador Larroca, , Pedro Zarco y los del colectivo “7 Monos” con Jordi Bayarri, Sergio Córdoba, Manuel Bartual, Victor Santos, Manuel Castaño, Jesús Huguet y Juan Pedro Quilón.
Para acabar llegamos al periodo que abarca desde el año 2000 hasta nuestros días; es “El Siglo XXI”, un periodo que se estrena con la entrega por el Ministerio de Cultura, de la Medalla al Mérito de Bellas Artes a Miguel Quesada , pero que nos no retrotrae ni por asomo a la época dorada ni aclara la difícil situación en la que está inmerso el sector pero que, aún así, resulta positivo (hasta se puede hablar de un cierto renacimiento) para los intereses valencianos, en parte, por la cantidad de premios con los que han sido galardonados muchos de los artistas de esta tierra (los nacidos aquí y los de adopción) y su obra.
Importantes premios otorgados por los distintos Salones del Cómic y por Asociaciones vinculadas al tebeo, sin descartar los que han caído a nivel nacional, incluidos dos premios Goya. También han sido los años de la apertura de “Futurama” y la creación, por un grupo de valencianos, de la AACE (Asociación de Autores de Cómic de España) y de la Asovalcon (Asociación Valenciana de Cómic) que ha propiciado la celebración en Valencia de las Jornadas del Cómic y ha colaborado en la puesta en escena de un documental sobre el género titulado “Héroes del tebeo valenciano”, del que es autor Quico Díaz. También ha sido el tiempo de grandes exposiciones como fueron entre otras “Tebeospain” en 2003, “Los tebeos valencianos” en 2007, y “Un siglo de tebeos” en 2013 que tuvieron lugar en la Biblioteca Valenciana.
Hubo otras exposiciones interesantes especialmente en el MuVIM, en el recinto de Las Naves y en la sede de la APIV. Este siglo igualmente ha sido el de la puesta en marcha del micro mecenazgo (crowdfunding) y de las publicaciones online principalmente por cuenta de Jordi Bayarri. De la invención por parte de Paco Roca, del llamado cómic social y de la oferta de fanzines como “Argh!” de Elfélix y Jorge Parras y el “Usted” de Esteban Hernández.
Del buen hacer, en casa y en el exterior, de Salvador Larroca, (Premio Eisner), Sergio Bleda, Paco Roca, Rafa Fonteriz, Daniel Torres, Victor Santos, Miguel Calatayud, Jaime Brocal Remohi, Carlos Ortin , Francisco Ruizgé, y la del incombustible José Ortiz de la mano de Bonelli en Italia, y también de Miguel Angel Giner, Ramón Marcos, César Tormo, Calpurnio, Lalo Kubala, Nacho Casanova, Sergio Córdoba, Manuel Bartual, Jesús Huguet, Pedro Zarco, Sento Llobell, Carlos, Ortín, Max Vento. Pablo Auladell, José Fonollosa, y otros. De igual manera está siendo el tiempo de las chicas que dibujan: Ana Miralles, Ana Juan, Cristina Durán, Lola Lorente, Mireia Pérez, Enkaru, María Herreros, Lydia Sánchez y Ana Oncina.
De determinadas editoriales como Edicions de Ponent, de Paco Camarasa, Media Vaca de Vicente Ferrer y de otra que nos vino del norte: Aleta Ediciones de Joseba Basalo. De la publicación de importantes obras de consulta como son: “Clásicos en Jauja” (premio Yellow Kid) y “Tragados por el abismo” de Pedro Porcel y “Viñetas a la luna de Valencia” de Álvaro Pons, Pedro Porcel y Vicente Sorni). De la incorporación del día del cómic gratis, de la Valencia Webcomicón, de la recuperación en 2007, por José Sanchis, de los derechos sobre “Pumby” y de la puesta a punto de “Tenderete” festival de la autoedición gráfica y sonora que incluye ilustración y cómic.
Aparte la obra recoge 45 entrevistas realizadas a los siguientes autores: Adrián Bago, Manuel Bartual, Jordi Bayarri, Mique Beltrán, Manuel Benet, Sergio Bleda, Rafael Boluda, Burguitos, Miguel Calatayud, Calo, Calpurnio, Enrique Cerdán, Sergio Córdoba, Cristina Durán, Miguel Ángel Giner, Elfélix, Enkaru, José Fonollosa, Rafa Fonteriz, Manel Gimeno, María Herreros, Jesús Huguet, Lalo Kubala, Salvador Larroca, Sento Llobell, Alberto Marcel, Ramón Marcos, Micharmut, Ana Miralles, Ana Oncina, Ortifus, Jorge Parras, Miguel Quesada, Vicente Ramos, Paco Roca, Arturo Rojas de la Cámara, Lydia Sánchez, Victor Santos, Cesar Sebastián, José Tomás, Daniel Torres, “Che”, Max Vento, Paco Zarco y “Zésar”.
El libro acaba con una serie de páginas dedicadas a “Las tiendas especializadas de la Comunidad Valenciana” escrito por María Lapiedra Benavent, a “Eventos” de la que es autor Carlos Ciurana, a “Las webcómics”, de Ricardo Engrá y a “La Biblioteca Valenciana y el tebeo” .escrito por Miguel Muñoz y Charo Tamarit.
José María Varona “Che”
Junio 2015
FOTO: Carlos Ciurana.
__
El libro recoge paso a paso la realidad de una industria que pasado el tiempo convirtió a Valencia, en especial gracias a las Editoriales Valenciana y Maga, en uno de los pilares de lo que fue en España la época dorada de la historieta. Luego, de acuerdo con la cronología trazada, la obra nos habla de otros periodos por los que pasó el tebeo valenciano hasta llegar a nuestros días.
Al repasar el libro (con cubiertas de Paco Roca), en el preámbulo, nos encontramos en primer lugar con los testimonios de María José Catalá y Marta Alonso vinculadas a la Biblioteca Valenciana (editora de la obra) a través de la Consejería de Educación, Cultura y Deporte de la Generalitat, seguidos de los escritos de Gonzalo Torres, Álvaro Pons, Pedro Porcel, Ismael Quintanilla y Mac Diego. Después es Ricardo Guillamón quien nos habla de los orígenes del tebeo (siglo XIX hasta 1912) para continuar con el periodo de 1913 hasta 1930 que él titula “De la ilustración a la historieta”.y del periodo 1931-1939 que corresponde al de ”La República y la Guerra Civil”. A continuación Gonzalo Torres es quien trata de “La edad de oro del cuaderno: La Escuela Valenciana” 1940-1964, para seguir con “El exilio” que él sitúa entre 1965 y 1975. Carlos Ciurana comenta lo que fue “La Nueva Escuela Valenciana” que ubica en el periodo 1976-1990; luego continúa con la época que va de 1991 a 1999 que pertenece a “La crisis de los noventa”. Al final es Ricardo Engrá el que se atreve con la última parte: “El Siglo XXI” que considera el periodo del año 2000 hasta nuestros días.
En todas esas páginas encontramos información amplia de unos primeros pasos que se asociaron a los “aucas” y a los “coloquios” de ciegos, acompañados de otros que tratan de las primeras publicaciones que buscaban entretener, seguidas de otras dedicadas especialmente a los niños como fueron ªPerragorda”, “Meñique”, “Niños” y “Los Chicos”. “La edad de oro” contempla el trabajo de autores como los hermanos Gago, Vañó, Quesada, José y Leopoldo Ortiz, Bermejo, José Sanchis, Juan Carbó; José Lanzón, Karpa, Emilio y Celedonio Frejo, Rojas de la Cámara, Marcet, Macias, Ambrós, Ramos, Liceras, Serafín, Palop, Segrelles, Soriano Izquierdo, Alamar, Edgar y otros muchos que nos deleitaron con sus dibujos.”El exilio” nos habla de un periodo en el cual, con la valiosa ayuda de agencias como Bardon Art y Selecciones Ilustradas, muchos profesionales tuvieron que buscarse la vida fuera de nuestras fronteras, en países como Alemania, Italia, Reino Unido, Francia, Holanda o los Estados Unidos.
Entre esos autores recordamos a José Ortiz, Miguel Quesada, José Lanzón, Luis Bermejo, Pepe Moreno, González Alacreu, Vicente y Eduardo Vañó, Rafael Boluda, Manuel Benet, César Álvarez “Zésar”, Pedro Martinez y otros. En aquella “movida” tuvieron su importancia los Salones del Cómic y la Ilustración que se celebraron en Valencia auspiciados por el Club DHIN cuyo primer presidente fue Lanzón. De la época de la llamada “Nueva Escuela Valenciana” (expresión un tanto discutida), especialmente viene a mi memoria la figura de Miguel Calatayud una especie de alma máter de un grupo de jóvenes dibujantes compuesto por Sento Llobell, Daniel Torres, Mique Beltrán, Micharmut y Manel Gimeno, deseosos de poner en práctica nuevas ideas.
“La crisis de los noventa” recoge los problemas provocados en el sector por la invasión de otras publicaciones, en especial del manga y las relacionadas con los superhéroes, lo que no fue óbice para que aparecieran otras de corte nacional que dieron cobertura a la obra de autores como Paco Roca, Rafa Fonteriz, Ana Miralles, Sergio Bleda, Miguel Angel Giner, Cristina Durán, Ramón Marcos, Cesar Tormo, Josep de Haro, Lalo Kubala, Nacho Casanova, Jaime Brocal Remohí, Rafa Marín, Salvador Larroca, , Pedro Zarco y los del colectivo “7 Monos” con Jordi Bayarri, Sergio Córdoba, Manuel Bartual, Victor Santos, Manuel Castaño, Jesús Huguet y Juan Pedro Quilón.
Para acabar llegamos al periodo que abarca desde el año 2000 hasta nuestros días; es “El Siglo XXI”, un periodo que se estrena con la entrega por el Ministerio de Cultura, de la Medalla al Mérito de Bellas Artes a Miguel Quesada , pero que nos no retrotrae ni por asomo a la época dorada ni aclara la difícil situación en la que está inmerso el sector pero que, aún así, resulta positivo (hasta se puede hablar de un cierto renacimiento) para los intereses valencianos, en parte, por la cantidad de premios con los que han sido galardonados muchos de los artistas de esta tierra (los nacidos aquí y los de adopción) y su obra.
Importantes premios otorgados por los distintos Salones del Cómic y por Asociaciones vinculadas al tebeo, sin descartar los que han caído a nivel nacional, incluidos dos premios Goya. También han sido los años de la apertura de “Futurama” y la creación, por un grupo de valencianos, de la AACE (Asociación de Autores de Cómic de España) y de la Asovalcon (Asociación Valenciana de Cómic) que ha propiciado la celebración en Valencia de las Jornadas del Cómic y ha colaborado en la puesta en escena de un documental sobre el género titulado “Héroes del tebeo valenciano”, del que es autor Quico Díaz. También ha sido el tiempo de grandes exposiciones como fueron entre otras “Tebeospain” en 2003, “Los tebeos valencianos” en 2007, y “Un siglo de tebeos” en 2013 que tuvieron lugar en la Biblioteca Valenciana.
Hubo otras exposiciones interesantes especialmente en el MuVIM, en el recinto de Las Naves y en la sede de la APIV. Este siglo igualmente ha sido el de la puesta en marcha del micro mecenazgo (crowdfunding) y de las publicaciones online principalmente por cuenta de Jordi Bayarri. De la invención por parte de Paco Roca, del llamado cómic social y de la oferta de fanzines como “Argh!” de Elfélix y Jorge Parras y el “Usted” de Esteban Hernández.
Del buen hacer, en casa y en el exterior, de Salvador Larroca, (Premio Eisner), Sergio Bleda, Paco Roca, Rafa Fonteriz, Daniel Torres, Victor Santos, Miguel Calatayud, Jaime Brocal Remohi, Carlos Ortin , Francisco Ruizgé, y la del incombustible José Ortiz de la mano de Bonelli en Italia, y también de Miguel Angel Giner, Ramón Marcos, César Tormo, Calpurnio, Lalo Kubala, Nacho Casanova, Sergio Córdoba, Manuel Bartual, Jesús Huguet, Pedro Zarco, Sento Llobell, Carlos, Ortín, Max Vento. Pablo Auladell, José Fonollosa, y otros. De igual manera está siendo el tiempo de las chicas que dibujan: Ana Miralles, Ana Juan, Cristina Durán, Lola Lorente, Mireia Pérez, Enkaru, María Herreros, Lydia Sánchez y Ana Oncina.
De determinadas editoriales como Edicions de Ponent, de Paco Camarasa, Media Vaca de Vicente Ferrer y de otra que nos vino del norte: Aleta Ediciones de Joseba Basalo. De la publicación de importantes obras de consulta como son: “Clásicos en Jauja” (premio Yellow Kid) y “Tragados por el abismo” de Pedro Porcel y “Viñetas a la luna de Valencia” de Álvaro Pons, Pedro Porcel y Vicente Sorni). De la incorporación del día del cómic gratis, de la Valencia Webcomicón, de la recuperación en 2007, por José Sanchis, de los derechos sobre “Pumby” y de la puesta a punto de “Tenderete” festival de la autoedición gráfica y sonora que incluye ilustración y cómic.
Aparte la obra recoge 45 entrevistas realizadas a los siguientes autores: Adrián Bago, Manuel Bartual, Jordi Bayarri, Mique Beltrán, Manuel Benet, Sergio Bleda, Rafael Boluda, Burguitos, Miguel Calatayud, Calo, Calpurnio, Enrique Cerdán, Sergio Córdoba, Cristina Durán, Miguel Ángel Giner, Elfélix, Enkaru, José Fonollosa, Rafa Fonteriz, Manel Gimeno, María Herreros, Jesús Huguet, Lalo Kubala, Salvador Larroca, Sento Llobell, Alberto Marcel, Ramón Marcos, Micharmut, Ana Miralles, Ana Oncina, Ortifus, Jorge Parras, Miguel Quesada, Vicente Ramos, Paco Roca, Arturo Rojas de la Cámara, Lydia Sánchez, Victor Santos, Cesar Sebastián, José Tomás, Daniel Torres, “Che”, Max Vento, Paco Zarco y “Zésar”.
El libro acaba con una serie de páginas dedicadas a “Las tiendas especializadas de la Comunidad Valenciana” escrito por María Lapiedra Benavent, a “Eventos” de la que es autor Carlos Ciurana, a “Las webcómics”, de Ricardo Engrá y a “La Biblioteca Valenciana y el tebeo” .escrito por Miguel Muñoz y Charo Tamarit.
José María Varona “Che”
Junio 2015
FOTO: Carlos Ciurana.
__